jueves, 29 de enero de 2009

Fragmento

Piedras afiladas reciben el trote del salvaje caballo
Ahogado por el aire contaminado de una ciudad sin corazón
Altanero suburbio de cuatreros desmembrados
Subyugados por el relinchar libertario de un espíritu libre.

Un lodo y una charca, hogar de niños desnudos
La sangre azul de la lucha de la supervivencia
Famélicos sueños de un despertar roto
Tiranos deseos de una esperanza desgarrada.

Deja una huella de herida en su trote gallardo
La sombra de su locura se escurre entre tinieblas
Ávido de coronar la cima inexpugnable
Rumbo al país del precipicio sempiterno

El cielo enrojece furor de titanes
una celebración estéril
le tiemblan las patas
fin del viaje
abajo el telón